Los motores para toldos se presentan en forma tubular y se instalan en el interior del eje. Vienen en diferentes tamaños y diámetros para adaptarse a las necesidades de cada toldo. Al motorizar un toldo, se obtiene la ventaja de poder abrirlo o cerrarlo con solo pulsar un interruptor o un mando a distancia en lugar de tener que hacerlo manualmente con una manivela.
La forma tradicional de recoger un toldo es manual, utilizando una manivela. Por otro lado, el sistema motorizado ofrece una mayor comodidad en el manejo del toldo, permitiendo su apertura y cierre con un mando a distancia o un interruptor fijo, lo que proporciona un accionamiento automático del toldo.
Para motorizar un toldo, se pueden utilizar automatismos que permiten su accionamiento automático. Estos dispositivos suelen ser utilizados como un sistema de seguridad, controlando la posición del toldo en caso de condiciones climáticas adversas como viento o lluvia. Además, hay automatismos que regulan la posición del toldo según la intensidad de la luz solar. Con el conjunto de estos automatismos, el toldo puede funcionar de forma autónoma y sin necesidad de intervención humana.
Los toldos automáticos son una opción conveniente para proporcionar sombra a los muebles y protegerlos en caso de mal tiempo.
